¿Qué deja el 2016 en los links de golf? Memorias, recuerdos, asombros y tristezas. Birdies y bogeys. Aquí, un repaso de lo mejor y lo peor del año.
LO MEJOR DE 2016 — TROON: UN OPEN PARA LA HISTORIA
De los cuatro grandes campeonatos del año siempre hay uno que sobresale por sobre el resto y este año le tocó al Open Championship. A partir del jueves cuando Mickelson estuvo cerca de anotar el primer 62 en la historia de los majors, lo sucedido en Royal Troon quedará en la memoria, no solo como el mejor del año, sino como uno de los grandes Open de la historia.
Mickelson y Stenson jugaron juntos el domingo y dieron una exhibición que no olvidaremos. Salió con uno de ventaja el sueco y algo de nervios había, pero rápido empezaron a hacer birdies y ambos se prendieron en un duelo memorable. No sé si muchos lo recuerdan, pero Stenson llegó con dos de ventaja al tee del 18 y su golpe de salida frenó pocos centímetros antes del bunker que terminó con las esperanzas de Norman en 1989. Seguramente otra hubiera sido la historia si la pelota de Stenson se metía en ese bunker, pero no fue así por suerte para él y cerró con un gran birdie en el hoyo 72, para firmar 63 golpes en la ronda final, 264 golpes y 20 bajo par en el campeonato. Todos estos números son récord para el Open Championship.
Stenson se transformó así en el primer sueco en ganar un major y a los 40 años cerró una temporada fabulosa siendo declarado Jugador del Año en Europa. Una semana inolvidable en Troon.
LO MEJOR DE 2016 — JUEGOS OLÍMPICOS: LA VUELTA DEL GOLF
Cuando en 2009 el Comité Olímpico Internacional decidió incluir en el programa de Rio 2016 al golf no muchos tomaron conciencia de lo que significaba. El apoyo que esto le daba al golf en los países en donde este deporte no es muy popular era de suma importancia. En todo el mundo los comités olímpicos de cada país reciben dinero del estado para desarrollar los deportes que forman parte de los JJOO y a partir de ese momento el golf entró en ese círculo. Los meses previos a la disputa de los juegos hubo bajas importantes, declaraciones poco oportunas (algo que tratamos la semana pasada en lo peor del año) y discusiones acerca del formato de juego en Rio.
La cuestión es que llegó el día del comienzo del juego, el local Adilson Da Silva pegó el primer golpe y el golf volvió en forma oficial a los Juegos Olímpicos. Lo que vino después fue la confirmación del atractivo del golf en cualquier parte del mundo. Inclusive en un país como Brasil en donde el golf casi no existe, se vendieron todas las entradas del fin de semana para ver la definición. El rating de televisión en Suecia fue más alto que el del Open Championship cuando ganara Stenson (el sueco definió con Rose) y en Corea del Sur la audiencia televisiva fue la más alta en la historia del golf femenino para ver a Inbee Park colgarse la medalla dorada.
El golf tiene asegurado su lugar en Tokyo 2020 y en 2017 el COI decidirá sobre el futuro de nuestro deporte a partir de 2024. Para mí fue sin dudas el hecho más importante del año y es mi deseo que el golf siga formando parte de los Juegos Olímpicos en el futuro. De lo que no tengo dudas es que más de uno de los que no fue ya está arrepentido, y creo que varios de ellos estarán en Tokyo.
LO MEJOR DE 2016 — GRILLO: UNA REALIDAD SIN TECHO
Ganó su primer torneo como jugador regular, jugó los 4 majors y pasó el corte en todos ellos (algo que solo 14 jugadores lograron), terminó el año metido entre los 25 mejores del mundo, fue nombrado Novato del Año en el PGA Tour, pasó la barrera de los 3 millones de dólares en premios y lo que es todavía más importante, todos hablan de él. Todo esto que suena bastante increíble le sucedió a Emiliano Grillo. Lo más notable es que él no se asombra de lo que le sucede. Grillo es de esos extraños personajes que se ven en esas situaciones y por eso cuando le suceden para él es normal. Como si estuviera esperando que le pasen. Como si supiera que algún día le van a pasar.
A los 24 años e instalado en Estados Unidos desde hace ya casi 10, Grillo es un jugador diferente. Reconocido por toda la prensa, pero además respetado por los demás jugadores. El chaqueño creció jugando con Spieth, Thomas, Rogers, Kaufman y varios más de esa generación que egresó de la escuela secundaria en 2011 y que hoy están ya instalados en el tour. Hasta donde podrá llegar nadie lo sabe, como tampoco sabemos si sus picos más altos serán tan altos como los de Cabrera. Lo que sí me animo a decirles es que, si no existe alguna lesión o algún problema personal de esos que afectan la carrera de cualquier deportista, Emiliano Grillo jugará en el PGA Tour por muchos años y ganará varias veces.
Alguien me preguntaba este año si ganará Majors y eso es algo impredecible. Si no, pregúntenle a García, Donald, Westwood, Montgomerie, Kuchar y tantos otros grandes nombres que nunca pudieron lograrlo. Grillo es un enorme jugador y tenemos la obligación de disfrutarlo, no exigirle nada y esperar que las cosas sucedan. Lo bueno es que él sabe que llegarán.
LO MEJOR DE 2016 — DJ: EL AÑO ESPERADO
Finalmente Dustin Johnson rompió el maleficio de los majors y levantó el trofeo del US Open en Oakmont. Pebble Beach 2010 fue el primer golpe que se pegó Johnson cuando arrancó bogey, triple y doble el domingo para perder contacto con la punta. Un par de meses después apoyó el palo en un lugar con arena en el 18 de Whistling Straits sin saber que era uno de los más de 1000 bunkers que Pete Dye puso en ese cancha. Los dos golpes de multa lo dejaron fuera del playoff. Un año más tarde venía peleando con Darren Clarke el Open en St.Georges y en forma inexplicable tiró afuera su segundo golpe en el 14 para dejarle servido el campeonato al norirlandés.
Llegó 2014 y problemas personales lo dejaron fuera del tour por 8 meses. En 2015 punteaba en St.Andrews luego de dos rondas y la mayoría lo daba como ganador, pero otra vez el fin de semana fue malo para DJ. Finalmente, y a pesar del desastre que hizo la gente de reglas de la USGA, Dustin Johnson se quedó con su primer gran campeonato. En 2016 ganó un major (US Open), un WGC (Bridgestone) y uno de los playoffs (BMW). Todo estaba listo para coronar una gran temporada en Atlanta, pero otra vez el domingo jugó mal. Poco importó porque el año ya estaba hecho para Johnson que de aquí en más será un jugador temible en cada semana en la que se presente.
Augusta parece hecha para él y Erin Hills, sede del US Open en 2017, puede ser la cancha más larga en la historia de los Majors. Ya ganó uno y se sacó el peso que tenía en su espalda. Ahora puede ganar varios más de esos que todos quieren.
LO MEJOR DE 2016 — TIGER: UN REGRESO QUE SE HIZO ESPERAR
Finalmente volvió a jugar. Luego de más de 15 meses, Tiger Woods clavó el tee en el hoyo 1 de Albany y compitió junto a un grupo de 18 de los mejores del mundo. Hubo de todo, bueno y malo, muy bueno y muy malo, pero eso poco importó. Lo que todos esperábamos era verlo pegarle a la pelota en competencia y eso llegó la primera semana de diciembre en Bahamas. Ahora habrá que verlo jugar en el tour con todo lo que eso significa.
Fuente:ESPN