Una buena vuelta empieza mucho antes de que el jugador haga su primer swing. Empieza con su plan de juego.
El plan de juego de un golfista incorpora una estrategia para jugar cada hoyo. Pero es mucho más que eso. Un plan de juego completo anticipa todas las contingencias que pueden aparecer en una vuelta de golf, pero independientemente de lo que suceda en el campo, un jugador con un buen plan de juego tiene la sensación de que se anticipa la posibilidad. Ya sabe la respuesta más inteligente porque la ha pensado con antelación.
Lo importante es que su plan de juego refleje un juicio honrado de los puntos fuertes de su juego, y que el palo que planee jugar sea uno que pueda usar bajo presión con absoluta confianza. Hay gente que cree erróneamente que pensar con confianza significa pensar con descuido, que con un golfista es lo mismo, que uno con confianza tira siempre a bandera. No es así. Un golfista inteligente y confiado, después de considerar sus propias habilidades, apunta a la bandera en algunas situaciones, y se aleja de la misma en otras.
Un plan de juego inteligente tiene en cuenta el hecho que, dada la longitud del hoyo, tendrá que hacerse casi con seguridad con un hierro medio largo. Un plan de juego inteligente reconoce que en la mayoría de ocasiones es mejor no tirar a las banderas ajustadas.
PENSAMIENTOS PARA PLANEAR
- Una cuidada preparación proporciona confianza.
- Un plan de juego completo anticipa todas las contingencias que pueden aflorar en una vuelta de golf.
- Su actuación siempre puede alcanzar sus expectativas.
- Existe una diferencia entre planear con confianza y planear descuidadamente.
- La estrategia correcta para un hoyo en concreto la dictan primero los puntos fuertes del juego del golfista.
- El juego lento, el viento, la lluvia con contingencias con las que debe contar en su plan.
Por: Bob Rotella
Extraído del libro: ‘‘La mente del golfista’’