El golfista estadounidense Tiger Woods no se niega a la posibilidad de volver a los campos como jugador profesional, pero los resultados de sus cirugías en la espalda con intención de mejorías aparentemente han hecho un efecto contrario.
A pesar del «optimismo» que el ex número uno del mundo ha querido mantener, hay una realidad de la que no se puede salir, y el propio Woods reconoció públicamente que podría no volver a jugar a nivel profesional. «Sí, definitivamente. No sé qué me depara el futuro», dijo este miércoles Woods en la rueda de prensa antes del inicio de la ‘Presidents Cup’ al ser consultado sobre si piensa en la posibilidad de no volver a competir.
El golfista estadounidense, de 41 años, ha pasado por una compleja recuperación de una serie de operaciones de espalda, lo que le ha permitido jugar solamente seis rondas competitivas en los últimos dos años.
«No sé lo que significa estar cien por ciento sano tras ocho cirugías, pero trataré de estar lo más cerca que pueda de ese número», destacó en su primera rueda de prensa desde que fue arrestado en mayo acusado de conducir bajo los efectos de las drogas. Las investigaciones policiales posteriores encontraron que había consumido varios medicamentos de venta bajo prescripción.
«En términos generales, soy optimista respecto al progreso. El dolor se ha ido, pero no sé cómo se comportará mi cuerpo cuando empiece a jugar. Me va a tomar tiempo darme cuenta de mi capacidad para jugar, pero no estoy apurado», agregó Woods.
Fuente: m.europapress.com