Estados Unidos logra la victoria más contundente desde 1979 cuando se incorporaron los jugadores continentales. Sergio y Rahm pierden sus partidos.

Team USA . (AP Photo/Jeff Roberson)
Es la tercera victoria estadounidense en las últimas diez ediciones, triunfo que aviva la rivalidad entre ambos bandos, necesaria para las métricas de las audiencias televisivas estadounidenses.
La edición de 2021, que resistió con el nombre de Ryder Cup 2020 por el traslado a causa de la pandemia, elevó sobre todo a Dustin Johnson, ganador de cinco puntos (primer pleno estadounidense desde Larry Nelson en 1979), y a Steve Stricker, el capitán cuyas seis elecciones -cuatro debutantes- respondieron con contundencia. Confeccionó un ‘dream team’ y con futuro. El objetivo ahora será ganar en Roma 2023, 30 años después de hacerlo por última vez en suelo europeo.
Europa, por su parte, sufrió una derrota que escuece. Wiesberger, Casey y Fitzpatrick no sumaron un punto. Westwood lo hizo en los minutos de la basura con la Ryder sentenciada. Quizás también ha llegado el momento de reflexionar sobre la idoneidad del proceso de selección. Europa sólo tiene tres elecciones del capitán. Ninguno de los jugadores que se han ido de vacío, clasificados por sus méritos, han ganado un torneo en los últimos cuatro meses. Y sólo Wiesberger en los últimos ocho, en un torneo menor como el Abierto de Dinamarca.
La próxima Ryder en 2023 se jugará en el Marco Simone Golf Club en Italia.
Fuente: marca.com
Fotos: abc7chicago.com